lunes, 22 de junio de 2015

Nutrición Cutánea de la Piel


     El conocimiento y la comprensión de los mecanismos comunes y particulares de las deficiencias funcionales y/o estructurales que se asocian con el envejecimiento y que pueden deberse a diversas razones (cronológicas, exposición continua a tóxicos, defectos de eliminación y desintoxicación cutánea, irradiación solar, etc.), que alteran, bloquean e incluso cambian el proceso metabólico orgánico, acelerando o retardando el envejecimiento, permite diagnosticar, prevenir y eliminar de forma efectiva algunos de los cambios metabólicos y morfológicos ocasionados por el mismo.

     La piel envejecida se manifiesta histológicamente por alteraciones de membrana y adhesión molecular, con matrices celulares anormales y alteraciones de la actividad enzimática, acompañadas de disminución de la sobrevida celular, entendiendo la célula como la unidad fundamental de los tejidos, organos y finalmente, del organismo.

     La piel, al igual que el resto de los órganos, efectúa diversos procesos metabólicos cuyos sustratos son los mismos, o casi los mismos, del resto del organismo.

     Se puede afirmar pues, que la base para modular el envejecimiento esta en mejorar la función celular y de esta forma, cambiar secundariamente el metabolismo integral, facilitando además la eliminación de toxinas endógenas y exógenas que afectan a la función celular y producen la progresión del envejecimiento. Estas toxinas, cuando no pueden ser eliminadas, entorpecen las diferentes rutas tanto de nutrición, excreción y de intercomunicación tisular, afectando así el desempeño celular y ocasionando en forma secundaria, progresión del envejecimiento.

     Bajo el principio de: “la piel se nutre de dentro a fuera”, es importante la aplicación loco-regional de los nutrientes ya que existen procesos de envejecimiento que bloquean la nutrición celular satisfactoria: glicosilación proteica no enzimática, cambio de circuito circulatorio (del circuito largo o metabólico al corto o no metabólico, alteración de la unidad de Merlen), alteraciones de drenaje, caída de la hormona de crecimiento, alteraciones del cortisol y de las hormonas sexuales sea de causa prematura, cronológica o secundarias a alimentación, fármacos o stress vital, que ocasionan alteraciones metabólicas y hacen que los nutrientes no sean distribuidos en la forma necesaria a la piel y al tejido conectivo.

     El manejo de una nutrición cutánea loco-regional específica de vitaminas, co-vitaminas y cofactores (en cantidades óptimas), es indispensable para el adecuado funcionamiento celular, logrando de esta manera la reversión del proceso alterado que se traduce en un mal funcionamiento celular y/o tisular y finalmente en apoptosis y muerte celular.

     A través de la nutrición celular especifica balanceada y aplicada a nivel dérmico superficial, se producirán grandes cambios por estímulos nerviosos, químicos, físicos, inmunológicos y de reparación, que se traducirán en una mejoría del funcionamiento y de la sobrevida celular; en otras palabras, en un proceso "antienvejecimiento".

HAZ CILC AQUÍ PARA CONOCER NUESTRAS OFERTAS DE PRECIOS POR TRATAMIENTOS FACIALES Y COMBINADOS

No hay comentarios:

Publicar un comentario